Si ya has decidido vender tu vivienda, seguro que te estarás preguntando si puedes venderla tú mismo/a. La respuesta es claramente afirmativa. Vender una casa es algo que cualquiera puede hacer por su cuenta. Entonces, ¿por qué motivo no deberías hacerlo y ahorrarte así los gastos de una inmobiliaria?. Pues por el mismo motivo por el que no te cortas el pelo en casa y vas a una peluquería o por el que sales a cenar en una ocasión especial en vez de cocinar en casa: porque sabes que estás en manos de profesionales con experiencia que harán que te despreocupes de todo.

Si aún así, te armas de valor y decides vender tu casa por tu cuenta deberás saber que, entre muchas otras cosas tendrás qué:

 

• Fijar el precio de la vivienda adecuado al valor exacto de mercado. De no hacerlo, corres el riesgo de venderla por un valor inferior al suyo o incluso de no venderla porque la tasación que has realizado es superior a su valor de mercado.

 

• Anunciarla y encargarte de su difusión y de buscar compradores. Esta es una de las tareas más complicadas, buscar compradores realmente interesados. Para ello tendrás que preparar tu casa para su venta, realizar buenas fotografías de la vivienda, encargarte de hacer una buena descripción de ésta y encargarte de buscar canales de difusión profesionales.

 

• Una vez hayas conseguido compradores interesados tendrás que empezar a organizar las visitas. A la hora de enseñar la vivienda deberás tener una disponibilidad horaria amplia para recibir las visitas. Además de saber mostrar tu vivienda y ser capaz de contestar a todas las preguntas que te realicen los interesados.

 

• Tendrás que negociar con los compradores, por lo que debes estar preparado para ello y mantener la calma para llegar a un acuerdo final justo y lo más rápido posible.

 

• Una vez superados todos estos pasos llega la firma del contrato. Asegúrate de obtener los contratos adecuados, infórmate y conoce bien la legislación en materia de compraventa. Otra opción es contar con los servicios de un abogado que redacte el contrato y te ayude a determinar las condiciones.

Como ves, vender una casa requiere de un montón de trabajo y de conocimientos sobre el mercado y el sector para poder hacer las cosas lo mejor posible. Cometer un pequeño error durante la venta puede resultarte muy costoso, así que, ¿por qué no dejarte cuidar y asesorar por profesionales que tienen amplia experiencia en este tipo de operaciones? En Homim nos encargamos de todo el proceso de compra-venta, para que te despreocupes por completo.