Vender en exclusiva es la mejor opción según dicen las matemáticas y vamos a desarrollarlo en éste post.
Uno de los mejores papeles cinematográficos de Rusell Crowe es la interpretación de John Forbes Nash en una mente maravillosa. John F. Nash es uno de los matemáticos más brillantes del siglo XX conocido por la teoría de juegos.
El dilema del prisionero es un problema fundamental de la teoría de juegos que muestra que dos personas pueden no cooperar incluso si en ello va el interés de ambas.
Visto de otra manera os planteamos el caso de Al y de Bill. Imaginemos a dos “gangsters” que han sido detenidos por tráfico de drogas pero el FBI sospecha que, sin pruebas, pueden estar involucrados en un delito mucho mayor de atraco a mano armada.
Uno de los recursos más utilizados por las fuerzas policiales es separar en dos salas incomunicadas a cada uno de los reclusos y proponerle éstos 4 escenarios (Seguro que habéis visto ésta escena en muchas de las series policiales pero es así como se actúa en éstos casos en la vida real). Si nadie confiesa solo les condenarían a 2 años por narcotráfico a cada uno. Si uno confiesa y el otro no al primero le bajaría la condena un año y al otro le ampliarían a 10. Pero si el otro confiesa y el primero no, al primero le ampliarían a 10 y al segundo se la reducirían a 1 año. Finalmente, si los dos confiesan, tendrían 3 años de condena cada uno.
Veréis resumido en la siguiente imagen las decisiones que se le plantean a éstos dos reclusos.
Hay que añadir que ellos no son hermanos, ni familia ni les une un vínculo tan fuerte como para traicionar al otro.
Por lo tanto, a pesar de que la situación más favorable para los dos es no confesar, al desconocer qué decisión tomará el otro acabarán, como dice el teorema, tomando una decisión menos favorable. En éste caso, el cuadro inferior derecho, es decir, confesar los dos y ampliar de 2 a 3 años la condena por miedo a que el otro si confiese.
Y os preguntaréis, ¿qué tiene que ver esto con vender mi piso sin exclusiva?
Imaginemos a la inmobiliaria Rodríguez y a la inmobiliaria Pérez. El propietario ha puesto a la venta el inmueble con las dos, además de otras inmobiliarias.
Si el comprador detecta que el mismo inmueble lo comercializan tanto Inmobiliaria Rodríguez como inmobiliaria Pérez sabrá que si una no le ofrece una bajada de precio irá a la siguiente.
Así, el comprador se convertirá en el agente del FBI y las agencias en los prisioneros. ¿Por qué? Porqué presionará en la negociación a Inmobiliaria Rodríguez diciéndole que la inmobiliaria Pérez si ha bajado el precio.
La inmobiliaria Rodríguez, sabiendo que puede perder el piso, se encontrará ante el dilema del prisionero. Si no presenta la misma oferta al propietario puede que pierda la venta. Si se la presenta hará perder dinero al propietario pero garantizará estar también presente en la negociación. Así que, falto de información al haber un tercer participante acabará perdiendo tanto el agente como el propietario.
¿Qué pasaría si mi propiedad si está en exclusiva?
Si la vivienda está en exclusiva el comprador no dispondrá de más información que la que le proporcione el agente inmobiliario.
Así que la situación se invertirá siendo el comprador al que le falte información. Ahora el agente inmobiliario puede actuar en beneficio del propietario cuando le diga, por ejemplo, que el propietario no tiene prisa por vender y que eso lo sabe por qué es el único agente que trabaja esa propiedad. Así que las presiones por parte del comprador quedarán más diluidas y el propietario tendrá una negociación más ventajosa.
Pero, ¿asumo mucho riesgo si me “caso” sólo con una?
Al final, la información es el poder y una relación estrecha con el agente inmobiliario nos resultará siempre más beneficiosa.
Ahora bien, entendemos que el riesgo está en escoger la mejor inmobiliaria. En otro post hemos hablado de ello y os recomendamos ésta lectura para que os garanticéis elegir con garantías de éxito. https://www.promoges.es/blog-inmobiliario-barcelona/#
Estaremos encantados de asesorarte ante ésta y cualquier duda que os pueda surgir.